Tengas hijos o no, esta receta te vendrá muy pero que muy bien, porque podrás pecar de manera sana sin tener remordimientos, ya que contiene vitaminas, minerales y nutrientes esenciales naturales, apenas lleva azúcar y no tiene nada de colorantes ni conservantes. Preparar estas golosinas 100 % naturales es muy fácil y económico, porque las cosas hechas en casa siempre salen rentables, y eso sin mencionar lo bien que te lo vas a pasar. ¿A qué esperas? Hazte tus golosinas caseras hoy mismo!
Ingredientes
Vamos a necesitar lo siguiente:
- una taza y media de zumo de fruta o verdura (se pueden combinar), lo mejor es que sea natural, te ayudará el exprimidor o la licuadora
- 4 cucharadas de gelatina en polvo (se puede sustituir por agar-agar)
- miel (la cantidad depende del gusto y de los zumos utilizados, se suelen añadir 2 cucharadas)
- opcional: extracto de vainilla (u otros extractos) y vitaminas o minerales en polvo (una opción muy acertada si queremos que no les falten estas sustancias importantes a nuestros hijos)
A continuación te dejo algunos ejemplos de las combinaciones de frutas y verduras para obtener colores llamativos:
- rojo – fresas, zanahoria, remolacha y un poco de zumo de limón
- naranja – zanahoria, naranja, jengibre y mango
- amarillo – pera, manzana golden y pimiento amarillo
- verde – kiwi, repollo, pepino, manzana verde, uva blanca
- morado – moras, arándanos, manzana, remolacha y lombarda
Déjate llevar por la fantasía y crea tus propias combinaciones, experimenta y encuentra lo que más te guste. Cuidado con el zumo de piña, contiene un enzima llamado bromelina que hace que la gelatina no se solidifique.
Preparación
Vertemos el zumo preparado en una olla y añadimos la gelatina o el agar-agar. Esperamos a que el zumo absorba la gelatina y luego mezclamos.
Calentamos la mezcla a fuego medio sin llegar a hervir. Es muy importante que no hierva ya que se evaporarían las vitaminas tan preciadas y la gelatina perdería su propiedad de solidificar. Esperamos a que se disuelva toda la gelatina, incorporamos los ingredientes restantes, es decir miel, extractos y vitaminas y apartamos del fuego.
Vertemos la gelatina resultante en los moldes preparados (realmente nos sirve cualquier cosa, pero nos será más cómodo usar bandejas rectangulares como las del horno), dejamos que se enfríe y metemos a la nevera, donde debe quedar al menos 3 horas.
Pasado el tiempo la gelatina habrá endurecido y entonces podemos darle forma a nuestras golosinas. Cortamos la gelatina en daditos pequeños y ya no hay nada que nos impida disfrutar de estas delicias tan sanas.
Las guardamos en un recipiente hermético y nos durarán hasta 3 semanas. Pero los dos sabemos que no van a durar tanto.
¿Qué colores usarás para tus golosinas? ¿También las haces en casa?