El wrap suele ser la mejor opción de los fast foods

Fast food y comida para viajar. ¿Cómo comer sano cuando tienes prisa?

El tiempo te está pisando los talones y necesitas comer algo rápido. Si no te has preparado nada en casa, probablemente optarás por el fast food más cercano. ¿Pero cómo elegir una «comida rápida» que no perjudicará tu cuerpo?

Los alimentos de tipo fast food son populares, ya que son muy sabrosos, lo cual se debe a su alto contenido de grasa. Sin embargo, su valor nutricional es bastante bajo, ya que contienen grandes cantidades de sacáridos simples, les falta fibra y encima tienen alto contenido de sodio.

Además, una comida en forma de hamburguesa, patatas fritas y refresco dulce puede tener hasta 6.000 kJ, lo cual para algunas personas debería constituir el valor energético de todo el día. El problema consiste en que aunque con una comida así ingiramos un montón de energía, las porciones son pequeñas y pronto tendremos hambre de nuevo.

La mejor opción – un wrap sin mayonesa

Por eso el alimentarse en los restaurantes de comida rápida debería ser algo excepcional, sin embargo, aun así es posible elegir comidas que no sean tan calóricas.

Un ejemplo así es el wrap, la comida más plausible en el menú de los fast foods. Suelen llevar carne de pollo a la parrilla, verdura y si lo pedimos sin mayonesa, puede llegar a representar una comida bastante equilibrada y poco calórica. Y si no, siempre nos quedan las ensaladas que hoy en día suele ofrecer la mayoría de los restaurantes de este tipo. Otra vez deberíamos prescindir de las salsas y usar el aliño tradicional de aceite de oliva, vinagre y sal.

Pensar por adelantado

Siempre es mejor planear por adelantado el programa del día siguiente y preparar la comida para llevar en un tupper. Para los viajes podemos pillar fruta y verdura cortada, taquitos de queso, bebida de yogur, tortitas de maíz o arroz y por supuesto la suficiencia de bebidas no energéticas (agua, té, etc.).

Otra variante posible es el tan popular bocadillo que preparamos de pan integral con mantequilla o margarina, jamón dulce, queso y verdura, también se puede aprovechar el atún, huevo duro, pechuga de pollo, lomo, jamón serrano con tomate triturado etc.

Así que si sabemos que nos espera un viaje, siempre es mejor preparar algo en casa en vez de confiar que ya comeremos algo por el camino, porque no siempre se nos ofrecen opciones saludables y las comidas rápidas encima valen un ojo de la cara.